¿Sabes que ya puedes comenzar a jugar con Tu Bebé? Vale, puede que exagere, todavía queda un rato para que pueda devolverte la pelota, pero ya podéis divertiros juntos. Es un buen momento para que empieces a practicar con él juegos de estimulación temprana. ¿Estimulación temprana? diría mi madre (o MASH, Mis Amigas Sin Hijos) como si le estuviera hablando chino. No es nada nuevo mamá, es simplemente el tipo de cosas que ya hacías tú con tus hijos, y la abuela, y la bisa: cantar canciones, acariciarles, el juego de Cucú…
A mí me encanta este último porque además de que Niño Maravilloso se parte de la risa cada vez que ve aparecer y desaparecer a su MM (Mamá Maravillosa), por lo visto tiene otros beneficios: ayuda a tu bebé a superar la angustia de la separación, más conocida como mamitis aguda (de la que te hablaré más adelante porque aparece sobre todo a partir de los ocho meses, cuando tu bebé puede convertirse en un bebé lapa).
El único problema que tengo con el juego del Cucú es que mi NM tiene que pensar que su madre está loca. ¿Porqué? Porque yo le hago el juego al revés. En Francia, Cucú o mejor dicho Coucou, quiere decir Hola. Así que cuando me escondo digo: Donde esta maman? Y cuando aparezco digo Coucou! Él me entiende muy bien y se ríe mucho pero tiene que pensar ¿porqué esta loca no dice “Tas” como todos los demás?!